lunes, 20 de enero de 2014

Meteorológicamente el día comenzaba inmejorable. Después de varios días de lluvia y que, encima, había estado "diluviando" hasta así las 7 de la mañana, se agradecía mucho que a eso de las 9 saliera un sol radiante. Aunque el campo se esperaba bastante calado. 

Da gusto participar en pruebas de este tipo, participación moderada (700 corredores), carrera muy limpia y mejor organizada. 

Ya en la salida vi a varios amigos  y conocidos del mundillo de las carreras. Eduardo L. Larrubia, Manu Olmo, algunos del equipo del Camaleón,  algunos del grupo de los Midnight Predators y, por supuesto, mucho triatleta. 

En la salida nos posamos mi hermano Marcos, que a última hora se unió a la carrera y Javi Marquez, buen amigo y gran compañero de fatigas. 

La salida fue muy limpia, primer tramo urbano para ir acercándonos al campo y posteriormente a los pinares y sus interminables "sube-y-baja" que tanto desgastan. 

Salimos muy rápido, el ritmo fue alto y tras escasos kilómetros pasamos del asfalto al carril. Las primeras rampas llegaron y con ellas se iban separando los grupos de corredores para convertirlos en líneas de a uno. Los grupos se iban estirando. 

Javi, Marcos y yo dimos "caza" al resto del equipo de Javi, "Los Calentitos", que iban a buen ritmo y con firmes intenciones de dosificar para lo que se avecinaba. Sabios ellos!!

De repente nos vinos Marcos y yo solos, nos habíamos separado del grupo. Pusimos un buen ritmo, nos íbamos relevando y la cosa marchaba de maravilla. A base de correr juntos, Marcos y yo hemos creado un bien tándem, nos entendemos muy bien, aunque reconozco que hace un esfuerzo por no ir más rápido. A mi, obviamente, me viene de maravilla. 

Llegamos a un tramo de varios kilómetros donde el paisaje es maravilloso, pinares densos donde, entre luces y sombras, podías ver filas de corredores subiendo y bajando por el monte. Íbamos adelantando a casi todos, empecé a notar que iba más rápido de la cuenta, la fatiga me llegaba y aunque iba muy bien de piernas, no terminaba de recuperar una respiración óptima. Sobre el km 13, nos cruzamos las miradas y nos entendimos muy bien, Marcos iba a arrearle más rápido, yo personalmente no podía mantener ese ritmo. Le vi perderse por delante. 

Traté de volver a recuperar sensaciones y que la respiración cogiera de nuevo su ritmo. Una vez me volví a sentir recuperado pude volver a acelerar y correr a un ritmo algo superior. Las rampas se habían acabado y sabía que los kilómetros que quedaban eran ya volviendo a la línea de meta. A escasos 2km de la llegada, me cogió Javi y sus compañeros de Los Calentitos. Como veteranos habían sabido dosificarse y ahora venían ellos lanzados. Pude engancharme a ellos e íbamos casi al máximo buscando ansiosos la línea de meta. 

A apenas 300 metros del final veo a mi familia y la de Javi, Lucas, mi hijo, me hace señas de querer acompañarme para cruzar la línea de meta. Le monto en mis hombros y continuo hacia delante. Me costó la misma vida llegar con él encima, 18kg en los hombros se me hacían imposibles. Llegué haciendo "eses" y él con una cara de felicidad que merecía el esfuerzo. 

Ha sido un gustazo participar en esta carrera, ha sido una mañana perfecta para el deporte!

Finalmente, Marcos ha llegado en 1h39m, Javi y yo en 1h43m. 

Si hay alguien ahí, gracias por estar
Clic

0 comentarios:

Publicar un comentario

Blogger templates